Visita al campo de concentración de Terezín desde Praga

Excursión al campo de concentración desde Praga. terezín es ingloriosamente conocido como el mayor campo de concentración de la Segunda Guerra Mundial en tierras checas. Hoy en día, esta ciudad es un monumento a los trágicos destinos .

Originalmente, Terezín fue construido en el siglo XVIII como fortaleza estratégica para protegerse de los ejércitos prusianos. Visitará la ciudad de Terezín y su fortaleza en nuestro autobús con aire acondicionado. Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis establecieron una prisión policial en la Pequeña Fortaleza, y la propia ciudad se convirtió en un gueto judío. Tras llegar a la fortaleza, el guía le llevará a través de la historia bélica de Europa, donde conocerá cómo era la vida en el mayor campo de concentración checo. Terezín pertenece sin duda a los lugares históricamente muy interesantes, y visitarlo le ayudará a comprender la historia bélica de Europa.

No olvide consultar nuestras otras excursiones de un día. EXCURSIONES DESDE PRAGA

En la conciencia actual, Terezín se asocia principalmente con la persecución nazi durante la ocupación de nuestras tierras por la Alemania de Hitler durante la Segunda Guerra Mundial. En aquella época existía un campo de concentración para judíos deportados y también una prisión en la que se internaba principalmente a participantes de la resistencia antinazi. Nuestro programa también se centra en este periodo, que duró sólo unos pocos años pero que fue extremadamente grave y trágico en la historia del siglo pasado.

Sin embargo, Terezín se fundó como fortaleza militar ya a finales del siglo XVIII. El entonces reino checo formaba parte de la monarquía de los Habsburgo y tras las guerras libradas por el imperio de los Habsburgo a mediados del siglo XVIII, especialmente con la Prusia alemana, se construyó la fortaleza de Terezín para defenderse del ataque desde el norte. Como los ejércitos a menudo marchaban a lo largo de los ríos, la fortaleza se construyó en el valle del Elba, a ambos lados de su afluente, el río Ohře. En caso de asedio a Terezín, se planeó verter el agua del Ohře en los fosos de la fortaleza y en las cuencas de inundación artificiales. El sistema de fortificaciones y edificios militares fue diseñado por ingenieros militares del ejército de los Habsburgo, que se inspiraron especialmente en los conceptos de construcción de fortalezas francesas.

La fortaleza fue fundada en 1780 durante el reinado de María Teresa, tras cuya muerte ese mismo año recibió el nombre de Theresienstadt en su honor. La construcción de este sistema de fortalezas en una superficie total de 400 hectáreas continuó durante todo el reinado del emperador José II hasta 1790. En ocasiones llegaron a trabajar en él hasta 15.000 soldados, albañiles y otros artesanos al mismo tiempo, y se calcula que se utilizaron 400 millones de ladrillos. Terezín es una de las mayores fortalezas bastión del mundo. Todas las estructuras del edificio se han conservado bien, principalmente porque la fortaleza de Terezín nunca fue asediada ni estuvo directamente implicada en enfrentamientos bélicos. Sin embargo, es posible que contribuyera a prevenirlos durante mucho tiempo con su poder disuasorio.

Las dos partes de la fortaleza diferían mucho en tamaño y función desde el principio. En el interior de la Fortaleza Principal, en la orilla izquierda y occidental del río, se encontraba el cuartel general y la mayor parte de la guarnición militar, pero ya en 1782 se estableció allí también la ciudad real. En un principio, el asentamiento civil estaba subordinado al ejército y se encargaba principalmente de sus necesidades económicas. Desde finales de 1941, los ocupantes nazis convirtieron esta parte principal de Terezín, con sus barracones y casas del pueblo, en una especie de gueto moderno, pero esencialmente un campo de concentración. Si se utiliza el término gueto para referirse a la ciudad de Terezín durante la ocupación nazi, hay que tener en cuenta que se trataba de una zona vigilada donde los judíos prisioneros estaban completamente subordinados al mando nazi y realizaban trabajos forzados. Poco a poco, la población judía fue deportada allí en mayor y menor número, y desde allí partían transportes masivos hacia los campos de exterminio.

Por otro lado, la llamada Pequeña Fortaleza al este del río nunca tuvo habitantes civiles y sirvió como prisión estatal además de sus fines defensivos desde la época de la monarquía de los Habsburgo. En aquella época, allí fueron encarcelados los participantes en los movimientos húngaro y polaco por la soberanía nacional en la monarquía multinacional de los Habsburgo. Durante la Primera Guerra Mundial, tres jóvenes serbobosnios, implicados en el asesinato del heredero del trono austriaco, el archiduque Francisco Fernando de Este, el 28 de junio de 1918 en Sarajevo, fueron encarcelados en la Pequeña Fortaleza y murieron allí a consecuencia de sus penurias. La crisis resultante sumió a Europa y luego a otros continentes en el infierno sin precedentes de la Gran Guerra. La Pequeña Fortaleza de Terezín fue tomada por la policía política nazi Gestapo ya en junio de 1940 y retuvo allí principalmente a miembros detenidos de diversas organizaciones de la resistencia. La mayoría de los prisioneros de la Pequeña Fortaleza no eran de origen judío.